No sirvieron los abrazos

De opinión Entre nos Última hora

Entre Nos, por Alfredo Ponce //

Las imágenes dieron la vuelta al mundo, la tranquilidad de la noche, había expirado abruptamente por las ráfagas de armas de altos calibres. No era una amenaza, era la declaración de guerra, contra el mas alto funcionario de seguridad pública de la capital. La significancia de los hechos, son mas impresionantes que los hechos mismos.

La delincuencia no le teme a la autoridad, la reta, se le enfrenta, la ataca, la golpea. Alguien dijo: “las cosas se están saliendo de control”, yo pienso, se salieron de control desde hace tiempo, desde hace años. Si esto le sucede a una autoridad, ¿qué puede esperar el pueblo?.

El hecho es contundente, no sirvieron los abrazos ni los regaños de las mamás de los delincuentes. Se tiene que dar vuelta a la página, el plan no surtió efecto, pero el objetivo no puede perderse de vista. La autoridad debe buscar otra forma de cumplir con su obligación suprema, ofrecer seguridad al pueblo, para eso llegaron a sus elegantes puestos, para eso pidieron el voto, para eso pagamos los impuestos.

No podemos seguir viviendo en la utópica fantasía, de seguir apapachando a los que delinquen, a los que asesinan, a los que asaltan. Es tiempo de fajarse los pantalones y tomar decisiones. No se trata de salir a la calle a tirar balazos, a lo loco, como la farsa dirigida por un enfermo mental, que ahora está detenido en los estados unidos.

Se trata de verdaderamente, limpiar la casa de los que están en los organismos de seguridad y que no sirven para nada, los vividores de los puestos, los que ejercen la corrupción por medio de su negligencia, los que quieren engañar al pueblo, fingiendo que saben lo que las contundentes pruebas de los resultados, nos muestran que ni siquiera entienden.

La seguridad no es una materia que pueden aprender en cursitos en elegantes universidades. La seguridad es un derecho del pueblo que le han arrebatado, desde hace muchos ayeres. Omar García está bien de salud, pero dos de sus escoltas no la libraron y una desafortunada transeúnte pagó los platos que no había roto, quizá, en representación del pueblo, que sigue siendo abatido por esquirlas que vienen de todos lados y de las que no podemos escondernos, ni podemos contestar con la misma moneda, porque estamos inermes ante el poderío de los que delinquen.

No puede explicarse un atentado contra una autoridad si no hay gente infiltrada en las esferas más cercanas del poder y es tiempo de hacer una limpia.

SOMOS MÁS LOS BUENOS, PERO NO PODEMOS DEFENDERNOS.

Los grandes retos, requieren decisiones de igual tamaño y la seguridad, no ha sido enfrentada con decisión, ni con conocimiento, por ninguna autoridad desde hace muchos ayeres.

Discursos van, discursos vienen, cada quien protege su sillita y nos dice que están haciendo las cosas de forma impecable, pero el pueblo sigue muriendo, la gente sigue siendo atracada, la república sigue falleciendo en manos de la inseguridad y de la tibieza, de quienes deben de dar resultados.

Ya no nos interesa seguir escuchando discursos, con explicaciones que a nadie satisface. ¡Resultados!, exigimos todos, solo resultados . Las palabras, que se las guarden para cuando quieran enamorar a una muchacha. Hoy salvó la vida el secretario de seguridad de la capital de la república, gracias a que se transportaba en un vehículo con el blindaje mas pesado que hay disponible.

Pero el pueblo, no alcanza esos sistemas de protección. Hoy el pueblo clama justicia, quiere por lo menos tener la oportunidad de defenderse de un ataque. Ya no podemos vivir con las manos atadas. Si no pueden cuidarnos dejen que nos cuidemos nosotros mismos. Que cada quien cuide su rancho, que cada quien proteja a su familia. Que cada quien se convierta en su propio policía, porque los que se supone que deberían cuidarnos andan de guaruras de los funcionarios públicos, o están cuidando la casa de los gobernantes.

Cada que despertamos nos subimos a un ring a pelear con las manos atadas. Es importante, que hoy se tomen decisiones, una de ellas, es que se permita la portación de arma, para la defensa personal a los ciudadanos que comprueben un modo honesto de vivir, que hagamos una gran cruzada todos juntos contra la delincuencia, que nos defendamos entre todos, que hagamos valer la premisa de que somos mas los buenos, si, pero los malos, poquitos pero bien armados, no se ve por donde mas, podemos seguir escuchando discursos, pero ya no nos sirven de nada.

Que nos informen abiertamente quienes atacaron a Omar García, que limpien las fuerzas policiacas de halcones al servicio de la delincuencia, que saquen de sus puestos a los que ya demostraron que no saben nada del área de seguridad, que nos pongan a gente conocedora del tema, que permitan las armas para que el pueblo se defienda y que se modifiquen las leyes para que seamos una sociedad segura. La semana pasada fue un juez, esta semana pudo ser Omar García, ¿quien será la siguiente semana?

Nos encontramos en una semana.

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